Una fuerte tensión se vivió en el nuevo capítulo de El Internado, luego de que una dinámica liderada por Tonka Tomicic desatara una inesperada polémica entre los participantes. La actividad, llamada “Cuentos chinos”, consistía en revelar rumores sobre los integrantes del reality y confirmar si eran ciertos o no. Sin embargo, lo que comenzó como un juego terminó en un tenso intercambio que involucró a Fernando Solabarrieta, Iván Zamorano y la polémica Laura Bozzo.
Todo partió cuando se mencionó un quiebre entre Solabarrieta y Zamorano, vinculado a una promesa incumplida relacionada con el hijo del periodista, Nico Solabarrieta. Fue entonces que Laura Bozzo tomó la palabra sin filtro: “No conozco la historia, no soy chilena, pero en tres segundos capté que el amigo íntimo de él le hizo una promesa respecto a su hijo y no la cumplió. Que fue una mierda, yo lo digo y lo asumo”, lanzó, provocando la incomodidad del resto.
En medio del tenso momento, Daniella Campos intervino para advertirle a la abogada peruana que Blu Dumay, hija de Zamorano, estaba presente en el set. “Está la hija atrás, es un poco fuerte la palabra”, dijo Campos. Pero Bozzo no se contuvo: “Si está en un reality, es lo suficientemente adulta para enfrentarme a mí”. Las palabras afectaron profundamente a Blu, quien terminó llorando y buscó consuelo en Efrén Reyero, uno de sus compañeros.
Más tarde, Laura Bozzo se disculpó públicamente con la joven tras enterarse de quién era su padre. “No tenía idea de que él era tu papá, luego me entero de que era ‘Bam Bam’ Zamorano, a quien admiro profundamente. De corazón te pido disculpas”, expresó. Además, reconoció su carácter impulsivo: “Yo tengo un problema, suelto las cosas y después pienso. Digo ‘qué he dicho’. Pero nunca es con mala intención”, cerró.